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El modelo de Dios
Juan:5:30
Jesús dice: "no puedo yo hacer nada por mí mismo; según oigo, así juzgo; y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre " (Jn 5:30). No poder hacer nada por sí mismo puede parecer incapacidad. Pero recuerda que un poco antes Jesús revela que todo cuanto el Padre hace, el Hijo también lo hace, por lo cual aquí habla de omnipotencia y dependencia. El ser humano pecó cuando decidió ser independiente de Dios, y eso fue su ruina. Ahora tenemos ante nosotros un hombre perfecto, Jesús. Tan perfecto y dependiente del Padre, que no existe entre él y su Padre ni una fisura de separación. ¿Si Dios nos quisiese mostrar cómo debe ser el hombre perfecto a quién crees que usaría como un prototipo? Por desgracia no somos así. Por naturaleza nacemos separados e independientes de Dios. Por más que la palabra "independencia" tenga una connotación positiva en la sociedad actual, ser independiente de Dios es la peor desgracia que nos puede acontecer. Si nunca entendiste exactamente el significado de la palabra "pecado", aquí va: pecado es independencia de Dios; es hacer la voluntad propia. Basado en la afirmación de Jesús, ya dio a entender que él no tenía ningún pecado y no podía pecar. Para pecar él tendría que ser independiente del Padre, lo que era tan moralmente imposible, así como es físicamente imposible que gemelos siameses caminen en direcciones opuestas. Ahora piensa en esto: el modelo para que Dios acepte a alguien en el cielo es Jesús el Hombre perfecto. A menos que seas 100% como Jesús, no hay posibilidad de entrar allí. Es por eso que la carta de Pablo a los romanos habla de ser justificados gratuitamente por la gracia de Dios y por la redención que es en Cristo Jesús. Para ser justificado es necesario que tengas algo o a alguien que te justifique. Cuando das un examen de admisión la nota que tienes justificará o no tu ingreso a la universidad. La escuela proporciona un modelo que necesitas lograr como justificación que sabes lo suficiente como para estudiar allí. En el examen de admisión del cielo no pasarás sino alcanzas el modelo de Dios que es Jesús, el Hombre perfecto. Eso reduce a cero tus probabilidades de entrar. Si concuerdas que el historial de Jesús vale para ti, serás inmediatamente acepto en la presencia de Dios. Y así es. Al creer en él eres limpiado de tus pecados y, como dice en Romanos, justificado gratuitamente. Dios te verá a través de Jesús, el Hombre perfecto. Las notas que él obtuvo formarán parte de tu historial y serás aprobado. ¿Pero quién dice todo eso de Jesús aparte de él mismo? es lo que veremos en los próximos 3 minutos.
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